LEER REVISTA
DIGITAL

¿Turismo no deseado? Sé un viajero responsable

Viajar se ha convertido en algo así como un “concepto cultural” sagrado dentro de la sociedad. Con la globalización en aumento, las personas tienen la oportunidad de explorar diferentes partes de nuestro mundo y presenciar otras formas de vida, pero hay un alto costo asociado a ciertos aspectos del turismo. 

A medida que el mundo se vuelve más accesible para los viajeros a través de mejores conexiones de transporte y disponibilidad de información, es importante que reflexionamos sobre cómo nuestras acciones tienen un impacto directo en las comunidades locales, la vida silvestre, los ecosistemas, y el medio ambiente en general. 

El impacto negativo del turismo es ahora un hecho bien conocido. Los destinos populares a menudo tienen dificultades para mantenerse al día con el crecimiento exponencial de los viajeros, lo que genera aglomeraciones e instalaciones saturadas, infraestructura incapaz de hacer frente a la demanda, contaminación ambiental y, a menudo, costos crecientes para los residentes y los propios turistas. Si bien el turismo puede ser un medio beneficioso para estimular el crecimiento económico y ayudar al PIB de una nación, no podemos ignorar el desequilibrio en los beneficios otorgados a los principales actores de la industria sobre aquellos a quienes pertenece más: LOS RESIDENTES LOCALES. 

“Turismo NO deseado” es un término que usamos para denotar a los viajeros que acuden en masa a destinos menos conocidos, ejerciendo una presión y estrés indebidos sobre la infraestructura local y los residentes. 

Estas comunidades terminan soportando la carga de un número cada vez mayor de turistas, mientras que los beneficios del turismo fluyen principalmente hacia las corporaciones más grandes. 

Dada la tendencia del mercado a promover y fomentar el turismo, también es responsabilidad del público en general contrarrestar algunas de estas asociaciones negativas con la industria del turismo. ¿Cómo podemos nosotros, como viajeros conscientes, reflexivos y respetuosos, elegir viajar de manera que beneficie tanto al medio ambiente como a las comunidades a las que viajamos? Nuestro primer y principal desafío debe ser evitar el “turismo no deseado”. Pero, ¿cómo, como viajeros responsables, podemos hacer eso? 

Un aspecto clave de viajar éticamente es fomentar las “visitas inteligentes”. El objetivo es romper con los destinos demasiado turísticos y elegir los que pueden no ser los más comunes, pero igualmente sorprendentes en cuanto a cultura, tradiciones o aventuras al aire libre. Ir temprano o tarde en el día para evitar multitudes masivas también es una excelente táctica. Viajar en temporadas turísticas bajas le vendrá muy bien en el presupuesto y, lo que es más importante, en el efecto que tiene sobre el medio ambiente y la economía local.

Otra forma efectiva de limitar su impacto como viajero es elegir alojamientos que prioricen el cumplimiento de prácticas sostenibles y éticas. Muchos hoteles ecológicos, alquileres de vacaciones y opciones de alojamiento harán todo lo posible para garantizar que su impacto ecológico cause un daño mínimo, al mismo tiempo que retribuirá a la comunidad local de varias maneras. 

Como viajeros, tenemos la obligación de esforzarnos por ver diferentes lugares mientras sembramos beneficios tanto para las comunidades como para los ecosistemas y minimizamos los impactos negativos. Por encima de todo, la neutralidad climática y el compromiso ambiental deben ser considerados con suma consideración en nuestro curso de acción. 

Al seguir estos principios de viajes éticos, podemos garantizar la continuación positiva y responsable de la industria del turismo durante muchos años, ya que no existe una solución única para todos, sino una cuestión de mejoras continuas y esfuerzos de progreso inclusivo.

 

Ricardo Romero

Fb Tw In Ln | Saga Travel

sagatravel.com.mx

 

 

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *