LEER REVISTA
DIGITAL

LANZAMIENTO OFICIAL DE LA TARJETA DORADA: ESTADOS UNIDOS OFRECE RESIDENCIA Y CIUDADANÍA POR INVERSIÓN MILLONARIA

El pasado 10 de diciembre, la administración Trump anunció el lanzamiento oficial de la denominada «Tarjeta Dorada», un programa que representa una transformación significativa en la política de inmigración basada en la inversión. Este nuevo programa está diseñado para reemplazar las visas EB-5 y ofrece un estatus legal, con un camino directo hacia la ciudadanía estadounidense, a cambio de una fuerte contribución económica.

Inversión requerida y estructura del programa

El acceso a la Tarjeta Dorada está condicionado a un pago sustancial, diseñado para atraer capital extranjero directamente a las arcas federales. Para un individuo que busque la residencia, el costo se ha fijado en 1 millón de dólares. En el caso de corporaciones que deseen patrocinar a empleados nacidos en el extranjero, la tarifa se duplica a 2 millones de dólares por solicitud.

La Casa Blanca presentó el programa en un acto formal desde el Salón Roosevelt, rodeado de líderes empresariales, y puso en marcha el sitio web para que los interesados puedan comenzar el proceso de solicitud.

El reemplazo de la visa EB-5

La Tarjeta Dorada sustituye directamente a las visas EB-5, creadas en 1990 para incentivar la inversión extranjera. Sin embargo, el nuevo programa ha eliminado dos de las restricciones más importantes de su predecesor:

  1. Sin Requisitos de Creación de Empleo: A diferencia de la EB-5, que exigía la creación de al menos 10 puestos de trabajo a tiempo completo por cada inversor, la Tarjeta Dorada no requiere demostrar la generación de empleos en Estados Unidos.

  2. Sin Límites de Emisión: El programa opera sin un límite anual en el número de tarjetas que pueden emitirse, eliminando el cuello de botella que a menudo plagaba el sistema EB-5.

 

Objetivos y destino de los fondos

El presidente Trump ha defendido el programa, afirmando que su objetivo principal es atraer talento altamente calificado y generar ingresos directos para el gobierno federal. El mandatario aseguró que los fondos millonarios obtenidos de las inversiones de la Tarjeta Dorada «fluirán a una cuenta del Tesoro» federal. Esta cuenta, según se anunció, estará destinada a financiar proyectos nacionales de infraestructura y desarrollo.

El mandatario había promovido la idea de un programa de residencia por inversión durante meses, sugiriendo incluso que cada tarjeta podría haber costado hasta 5 millones de dólares antes de que se fijaran los costos actuales.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *